Inteligencia Artificial in Finance 2025: lo que la banca nos enseña sobre el futuro de los negocios
El 16 de septiembre tuve la oportunidad de asistir a AI in Finance 2025, un encuentro que reunió a líderes de bancos, fintechs, aseguradoras y compañías tecnológicas. Fui con la expectativa de escuchar casos y debatir sobre tendencias, pero me encontré con algo más profundo: un mapa de lo que ya está ocurriendo en la industria financiera y que puede trasladarse a cualquier negocio que quiera ganar relevancia en la era de la Inteligencia Artificial.
De la tendencia a la acción: Google Cloud
Natalia Scaliter de Google Cloud abrió con un dato incómodo: más de seiscientos mil millones de dólares invertidos en tecnología bancaria en los últimos diez años y la productividad sigue estancada. El problema no es la inversión, sino la falta de cultura y liderazgo que permitan convertir esa tecnología en valor real.
En mi trabajo con empresas de retail y consumo masivo, veo lo mismo: proyectos costosos que no logran mover la aguja porque se los trata como “adicionales tecnológicos” y no como parte del núcleo del negocio. La lección es clara: no se trata de comprar IA, sino de rediseñar la cultura para que la IA sea el motor de decisiones y resultados.
La mirada de la banca argentina: ADEBA y Banco Ciudad
Francisco Gismondi (ADEBA) y Elena Cafaldo (Banco Ciudad) recordaron que la IA puede generar eficiencia, pero también puede profundizar sesgos si se la entrena solo con datos históricos. La inclusión financiera que todos pregonan puede terminar en exclusión algorítmica si no se gobiernan los datos con responsabilidad.
Este punto conecta directamente con cualquier industria que maneje clientes: desde un supermercado que recomienda productos hasta una aseguradora que define precios. La pregunta no es si tenemos algoritmos, sino si tenemos mecanismos para auditar y corregir sesgos en tiempo real.
Desafíos y oportunidades: Ualá, YPF Digital y Mercado Libre
En otro panel, Pablo Guzzi (Ualá), Mauro Cercos (YPF Digital) y José Ortiz Masllorens (Mercado Libre) coincidieron en que el verdadero valor no surge de automatizar procesos viejos, sino de diseñar productos y experiencias AI-first.
Aquí está una de las claves para los sectores que asesoro: dejar de pensar en “digitalizar lo existente” y empezar a crear modelos de negocio que solo la IA hace posibles. Desde nuevos esquemas de fidelización hasta la personalización dinámica de servicios, las oportunidades aparecen cuando se rompe con la lógica tradicional.
Del mito a la realidad: Redbee Studios y Santander Tecnología
Ezequiel Apfel (Redbee Studios) junto a referentes de Santander Tecnología mostraron cómo la atención híbrida (humanos más asistentes virtuales) ya alcanza niveles de satisfacción equivalentes a la atención humana. No es un prototipo, es realidad en funcionamiento.
Esto proyecta directamente sobre industrias como retail y salud: el cliente ya no distingue si quien responde es una persona o un agente inteligente, solo exige rapidez, empatía y resolución. El reto está en diseñar modelos híbridos que potencien a los equipos humanos en lugar de reemplazarlos.
ADN AI-first: 123Seguro, Pomelo y N5 Now
Martín Ferrari (123Seguro) fue concreto: gracias a la IA pueden resolver siniestros en menos de una hora y ofrecer seguros de uno o dos dólares, algo impensado sin automatización inteligente.
Gastón Irigoyen (Pomelo) fue más allá y habló de un futuro donde convivirán dos sistemas financieros: el tradicional y otro totalmente digital, global e interoperable.
Julián Colombo (N5 Now) cerró con la idea de que no basta con sumar IA a procesos existentes, hay que diseñar productos desde cero con un enfoque AI-first.
Estos aprendizajes abren preguntas potentes para cualquier compañía: ¿qué productos de bajo costo o masivos podrían habilitarse en tu sector si la IA resolviera la operación? ¿qué pasaría si existiera un “sistema paralelo” en tu industria, donde lo digital sea el estándar y lo físico quede como soporte?
Confianza digital: Mastercard
Finalmente, Nahuel Bello de Mastercard mostró un ejemplo claro de cómo la seguridad se redefine con IA: tokenización y passkeys como doble motor contra el fraude. La confianza, más que un diferencial, se convierte en el requisito mínimo para participar en el mercado.
En cada industria, la pregunta es la misma: ¿qué significa confianza digital para tus clientes y cómo la garantizás en un entorno donde la automatización puede amplificar tanto las fortalezas como las vulnerabilidades?
Reflexión final
Lo que vi en AI in Finance 2025 es un espejo. La banca, con toda su regulación y peso estructural, ya avanza con casos concretos. Las demás industrias no tienen excusas.
La IA obliga a rediseñar procesos, productos y modelos de negocio desde cero. Obliga a gobernar datos con seriedad. Obliga a formar talento capaz de liderar el cambio cultural.
Ese es el tipo de acompañamiento que hoy necesitan las compañías de retail, consumo masivo, logística o salud. Identificar dónde la IA no es un agregado, sino la base para generar resultados medibles.
La pregunta que dejo abierta es simple: si la banca ya lo está haciendo, qué esperan las demás industrias para dar el paso?
